mio madre

Mio madre nun sabía idiomes pero yera tan mimosa... dicíame que con enfotu pues algamar cualquier cosa. Mio madre nun sabía idiomes pero falaba a les freses, facía ensalada rusa y mil tortielles franceses. Mio madre nun sabía idiomes pues pisó poques escueles, ¡y facía un caldu gallego y unes coles de Bruseles...! Mio madre nun sabía idiomes, yera una madre estupenda, facía arroz a la cubana con salsa a la boloñesa. ...Primeros versos del poemario Mio madre, de Aurelio González Ovies, editado por Pintar -Pintar, abril 2010 (Edición en asturiano)

jueves, 19 de abril de 2012

BIZCOCHO DE MAÍZ ( DE KIKO)

Una joya de bizcocho.
El mejor bizcocho de maíz que comí. De verdad. Hace meses que me reuní con Amparo y Tere. Os lo comenté en su día y también os contaba aquí lo bien que nos lo pasamos y las recetas que compartimos.
Me dejaron una libretina con muchas recetas y merendamos unas empanadas y suspiros. Poco a poco las voy haciendo, me gustaría mucho tenerlas todas probadas pero me es imposible. Siento no haber hecho primero este bizcocho, está realmente rico y suave. Parece casi imposible que con los ingredientes que lleva esté tan esponjoso. Si os gusta el sabor de la harina de maíz, el de siempre, éste es vuestro bizcocho.

A Tere le facilitó la receta un amigo llamado Kiko, de la localidad de Tapia. Yo no tengo el gusto de conocerlo, pero desde aquí le doy las gracias por ser tan generoso. Y a ti Tere, miles de besos por traerla a mi cocina.


Otro poema de A. G. Ovies

Para ser imperfectos
qué bien asimilamos los golpes de la vida.


La foto no refleja todo lo bueno que está.
Necesitamos

  • 5 huevos
  • medio vaso de leche
  • medio vaso de aceite de oliva suave
  • 13 cucharadas de azúcar
  • rallo de 1 limón
  • media copa de anís de guindas, o el licor que queráis 
  • 16 cucharadas de harina de maíz (amarilla, no maicena)
  • 1 sobre de levadura, tipo Royal
Elaboración

Batimos muy bien los huevos, hasta que queden espumosos.
Ponemos la leche y el aceite, y seguimos batiendo, cuanto más mejor.
Incorporamos el azúcar y batimos otra vez bien.
Ponemos el anís de guindas. Lo tengo casero. Añadimos el rallo de limón.
Y la mezcla de harina con la levadura, tamizada, y removemos bien. Nos queda una masa suave y más bien líquida.
Preparamos un molde, poniendo papel en la base, engrasando y enharinando y echamos la masa.
Precalentamos el horno a 160 grados y ponemos el bizcocho primero con aire y por abajo nada más. Cuando agrieta un poco por la superficie, ponemos calor por abajo y por arriba y dejamos hasta que se quede con un bonito color. Pinchamos para ver si sale el palillo limpio.
Dejamos que se enfríe un poco y lo dejamos enfriar del todo, desmoldado sobre una rejilla.
Espolvoreamos con azúcar glass una vez frío.
Éste es el resultado, un magnífico bizcocho. Lo preparé en el molde de los mantecados.
Con este magnífico corte, termino de comer uno y ya me apetece otro trocín, je.
¡¡¡QUE VOS PRESTE!!!