mio madre

Mio madre nun sabía idiomes pero yera tan mimosa... dicíame que con enfotu pues algamar cualquier cosa. Mio madre nun sabía idiomes pero falaba a les freses, facía ensalada rusa y mil tortielles franceses. Mio madre nun sabía idiomes pues pisó poques escueles, ¡y facía un caldu gallego y unes coles de Bruseles...! Mio madre nun sabía idiomes, yera una madre estupenda, facía arroz a la cubana con salsa a la boloñesa. ...Primeros versos del poemario Mio madre, de Aurelio González Ovies, editado por Pintar -Pintar, abril 2010 (Edición en asturiano)

jueves, 24 de octubre de 2013

TERESITAS DE SARTÉN



Esta vez la receta es de un libro de cocina antiguo: La moderna economía, de Carmina Fernández de Rivera, 1959, 5ª ed. Y se lo tengo que agradecer a otra buena amiga, sabía que lo cuidaría muy bien y me lo hizo llegar, acompañado de muchos más. Decir que me tocó el corazón es quedarme corta, seguro que si os gustan los libros, entenderéis muy bien este sentimiento. Gracias, Conchita, disfruto mucho leyendo las recetas, aunque me sea imposible publicar más a menudo. Pero ya iré poniendo las que sean fáciles y rápidas.
Gracias también a todas esas buenas personas que me rodean y me miman, y demasiado. Un beso.

La receta, unas teresitas de sartén, fáciles, económicas y rápidas de hacer, más aún de comer, pues si las hacéis, ya me contaréis.




Un poema de A. G. Ovies, de su último libro, Versonajes
FRUELA


Qué raro que tarde tanto...,



qué raro que no volviera,
si dejó las zapatillas
como otros días a la puerta.
Si se marchara de viaje,
me limpiaría la caseta
y me daría comida
y un bote con agua fresca.
Hace un mes que no aparece;
ya olfateé en la taberna,
no lo han visto ni en el pozo
ni en el bosque ni en la era.
Voy a a esperar unos días
y a ver si alguien me orienta.
Voy a recorrer el pueblo
y a llegarme hasta la iglesia.
La última vez, me parece, 
cuando le dolían las piernas
lo llevaron dos señores
de una furgoneta negra.
Y allí está noche tras noche
ladrando y aullando Fruela,
entre un blanco cementerio
y una sola y vieja escuela.   




Para las teresitas necesitamos:



  • 6 cucharadas soperas de aceite deshumado
  • 5 cucharadas soperas de azúcar
  • 3 cucharadas soperas de coñac
  • 2 huevos batidos
  • 1 cucharada de postre de levadura tipo Royal
  • un poco de sal fina
  • 1 taza de desayuno de harina
Además:
  • aceite para freír
  • azúcar para espolvorear
  • piel de 1 limón para deshumar el aceite



Elaboración:
Lo primero deshumamos el aceite, yo le puse unas pieles de limón y esperé a que se dorasen, se puede hacer con un trozo de pan duro. Dejamos que se enfríe.

Ponemos en un bol, el  aceite, el azúcar, el coñac, la levadura, los huevos batidos, la sal y la harina. Mezclamos bien, hasta que no quede ningún grumo de harina.  En abundante aceite, caliente, vamos poniendo masa a cucharadas . Yo las frío en un cazo, si ponemos pocas de cada vez, las teresitas dan la vuelta solas.
Las dejamos freír hasta que queden doradas, para las primeras que hice tenía el aceite más bien templado y me quedaron un poco descoloridas. Las vamos colocando en una fuente con papel de cocina para que absorba el aceite. 
Espolvoreamos con azúcar.

Y...¡¡¡ Seguro que desaparecen en poco tiempo!!!