lunes, 14 de febrero de 2011

FRIXUELOS

En mi pueblo los llamamos `mantes´.
Es un postre popular de mi tierra, Asturias. Ideal para cualquier ocasión y hora. En carnaval no pueden faltar. De niños salíamos disfrazados por los pueblos y en todas las casas nos invitaban a comerlos, así que no veáis ¡cómo nos poníamos! Luego llegábamos a casa y mamá nos tenía preparada una fuente con una torre de frixuelos y ¡a ver quién le decía que no, con la ilusión que derrochaba! Así que a comer más... En estos tiempos se preparan en cualquier época del año y forman parte de nuestro patrimonio gastronómico. Yo hago la crema por la mañana, si los voy cocinar por la tarde o por la noche, si los hago por la mañana. A por ellos
.
Preparados para una buena merienda con los amigos.
NECESITAMOS:
  • 3 huevos
  • 500 ml de leche
  • 4 cucharadas de azúcar
  • rallo de 1 limón
  • 1 rama de canela
  • 1 chorrín de anís
  • 1 pizca de sal
  • 325 gs de harina (orientativo, dependiendo de la calidad puede necesitar algo más)
  • azúcar y canela para espolvorear
  • a)  relleno de crema en forma de pañuelo, b) enroscado, c) en abanico

ELABORACIÓN:

Ponemos a hervir la leche con el rallo del limón, la sal y el palito de canela.

Dejamos que se enfríe, sin quitarle nada y una vez fría, la colamos.

Batimos los huevos bien con el azúcar y el anís y les añadimos la harina, la mezclamos a conciencia, para que no nos quede ningún grumo, y vamos echando a chorrito la leche. Mezclamos bien.Tiene que quedarnos una crema ligera.. Dejamos reposar en la nevera.


Ponemos en una sartén que no pegue un poco de aceite y dejamos que caliente muy bien. Ponemos un cucharón mediado de crema y esperamos que se haga por un lado para darle la vuelta y se termine de hacer.
Se llena el centro de la sarten con la crema y se gira alrededor para que se impregne toda la base de la sarten.
 Si el primero te rompe, no desesperes, los próximos salen mejor. Para darle la vuelta, si no dispones de maña con la sartén, te puedes ayudar introduciendo una espátula de madera un poco por debajo del frixuelo, presionar con la mano y voltearlo.



Una vez listo, lo colocamos en una fuente y lo espolvoreamos de azúcar y canela al gusto.
Muy ricos.

Vamos poniendo uno encima de otro, de esta manera se van empapando del azúcar por ambos lados.

Se sirven fríos o templados.
¡BUEN PROVECHO!