mio madre

Mio madre nun sabía idiomes pero yera tan mimosa... dicíame que con enfotu pues algamar cualquier cosa. Mio madre nun sabía idiomes pero falaba a les freses, facía ensalada rusa y mil tortielles franceses. Mio madre nun sabía idiomes pues pisó poques escueles, ¡y facía un caldu gallego y unes coles de Bruseles...! Mio madre nun sabía idiomes, yera una madre estupenda, facía arroz a la cubana con salsa a la boloñesa. ...Primeros versos del poemario Mio madre, de Aurelio González Ovies, editado por Pintar -Pintar, abril 2010 (Edición en asturiano)

lunes, 28 de marzo de 2011

PATATAS BRAVAS Y ALIOLI

Las suelo presentar en la misma fuente.
En casa nos gustan mucho. Recuerdo cuando era una adolescente, lo que nos prestaba salir por las tardes los sábados a picar por ahí. Una de las cosas que no podía faltar en nuestra mesa era las patatas bravas. En la nuestra y en la de casi todos los jóvenes que, como nosotros, con cuatro duros, querían llenar el estómago. Y vaya bien que lo pasábamos... Esos tiempos quedaron atrás, pero el protagonismo de las patatinas sigue ahí. No las preparo muy a menudo por lo de siempre, la dichosa dieta antitodo. Pero alguna que otra vez...


NECESITAMOS:
  • 1 kilo de patatas
  • 6 dientes de ajo
  • 6 cucharadas de mahonesa
  • dos cucharadas de perejil picado fino
  • 200 gramos de tomate frito
  • 3 cayenas
  • aceite de oliva
  • sal
  • 
    No les pongo mucha salsa.
    

ELABORACIÓN:

Lavamos bien la piel de las patatas y las ponemos a cocer en abundante agua salada hasta que al pincharlas con un palillo, éste entre sin dificultad.

Las escurrimos del agua y cuando templen un poco las pelamos y cortamos en trozos más bien grandes.

Ponemos las cayenas con 3 dientes de ajo pelados y picados finos, en una sartén con aceite de oliva y lo freímos, añadimos la salsa de tomate y un poquitín de agua caliente, dejamos que reduzca un poco el conjunto.
En lugar de cayenas podemos poner Tabasco.

Ponemos a freír las patatas en abundante aceite.

Mezclamos la mahonesa con los ajos restantes, bien picaditos y el perejil igualmente picado.

Ponemos la mitad de las patatas con la salsa de tomate y la otra mitad con la mezcla de la mahonesa.

Servir bien calientes.

¡QUE APROVECHE!