mio madre

Mio madre nun sabía idiomes pero yera tan mimosa... dicíame que con enfotu pues algamar cualquier cosa. Mio madre nun sabía idiomes pero falaba a les freses, facía ensalada rusa y mil tortielles franceses. Mio madre nun sabía idiomes pues pisó poques escueles, ¡y facía un caldu gallego y unes coles de Bruseles...! Mio madre nun sabía idiomes, yera una madre estupenda, facía arroz a la cubana con salsa a la boloñesa. ...Primeros versos del poemario Mio madre, de Aurelio González Ovies, editado por Pintar -Pintar, abril 2010 (Edición en asturiano)

martes, 28 de junio de 2011

CARNE DE TERNERA ASADA, al estilo de mamá

La carne queda muy tierna.
Otra receta de las fáciles. También se elabora en un momentín y es mejor de un día para otro. Esta carne era la que se preparaba en casa de nuestros antepasados para las fiestas del pueblo. Mamá siempre siguió esta tradición y he de deciros que es un plato fijo en nuestra casa por estas fechas. Decía una vecina, ya fallecida, que la primera semana de agosto, nuestro barrio olía a carne asada.... ¡¡Qué verdad!! Mamá empezaba a cocinar el viernes, en sus potas rojas, enormes, para que el domingo a mediodía todo estuviera perfecto. El guiso del arroz, con su pollo casero; el conejo serenando, para que perdiera su sabor a "conejizo", que más tarde prepararía con "patatines redondines y diminutes"; los brazos de gitano, tres para nuestra casa y seis para familiares (nunca pudo ir a las verbenas por quedarse cocinando), el refrito para la sopa, así como la cocción de los pescados y su posterior retirada de espinas y la carne asada, que le quedaba riquísima... Cuántas exquisiteces... ¡Un montón de trabajo, para zamparlo en un momento! Pero la hacía tan feliz tenernos a todos alrededor de la mesa, compartiendo su comida y cariño, que me duele el recuerdo, me duele... Este es el mejor homenaje que te puedo hacer, mamá, intentar preparar tus platinos, por lo menos la mitad de bien que lo hacías tú.

NECESITAMOS
  • 1 pieza de carne de ternera para asar
  • 1 kilo de cebollas
  • 6 dientes e ajos
  • aceite de oliva
  • sal y pimienta
  • 150 ml de brandy
  • 150 ml de vino blanco de buena calidad
  • medio litro de caldo de carne
La cebolla tiene un sabor muy rico.

    ELABORACIÓN
    Es importante poner los ajos tal como digo en la receta, con el fin de que no se quemen.

    Pelamos y picamos en juliana, en trozos más bien grandes, la cebolla.

    Limpiamos bien la carne con un paño de cocina y la bridamos.

    Salpimentamos frotando bien sobre la carne.

    En una cacerola amplia ponemos abundante aceite de oliva y los dientes de ajo sin pelar, con un corte hacia la mitad, para que no revienten.

    Cuando los ajos estén doradinos, ponemos la carne y dejamos unos 7, 8 minutos, hasta que esté bien dorada por ese lado.

    Le vamos dando vueltas hasta que la pieza esté bien dorada.

    Mientras tanto, en una sartén, con muy poco aceite, ponemos  cebolla que tenemos preparada y dejamos dorar hasta que parezca que se va a quemar. De esta manera logramos que se ponga la salsa de un bonito color dorado, sin necesidad de recurrir a concentrados de carne para conseguirlo.

    Añadimos la cebolla a la carne, salamos y dejamos hacerse hasta que la cebolla empiece a secarse, comprobando que no se pegue en el fondo de la cazuela.

    Incorporamos el brandy con el vino y dejamos el conjunto al fuego, hasta que no huela a alcohol y la cebolla se termine de ablandar.

    Cuando esté, apartamos del fuego y separamos la carne de la cebolla, pasando ésta por un pasapurés. Le añadimos el caldo de carne bien caliente y mezclamos bien.

    Una vez fría la carne, la cortamos en rodajitas y vamos colocando en una cacerola unas cucharadas de la salsa, unas rodajas de carne, salsa, carne, así hasta terminar todo.

    Colocamos al fuego y dejamos que se vaya espesando la salsa con la carne. Siempre a fuego muy, muy despacio. Lo dejo unas dos horas, hasta comprobar que la carne está muy tierna .

    Servir caliente, con unes patatines y pimientos.
    Acompañada de otras verduras también está muy rica.

    ¡QUE VOS PRESTE!