Muy jugosinos y sabrosos. |
Tanto es así, que se puso de parto de mi hermano ese domingo del gordo y le pillaron las contracciones preparando `bollines´ (el sábado publicaré la receta). Pues sí, que siguió tostando hasta que llegó la comadrona toda asustada, porque los últimos meses de embarazo habían sido un poco difíciles. Cuando la encontró en tal faena le echó una bronca y la metió en la cama. Efectivamente, mi hermano estaba muy a gusto y no quería salir. Dificil no, muy difícil parto, pero, gracias a Dios, todo salió bien. Dio a luz un niño precioso, que sería su ojito derecho toda la vida (sin menospreciar a ninguno, pero fue siempre con el que tuvo más afinidad). En fin, os cuento todo esto porque cuando se recuperó un poco, le dijo a su tía que si habían comido todes les bollines... ¡¡¡Así que nos dejó a todos esa herencia: la de ser muy llambiones también!!! Estos borrachinos los preparaba con frecuencia, cuando disponía de leche en abundancia, que solía ser cuando en casa de mis abuelos paría una vaca y había mucha. Nos encantaban, a unos fríos, a otros, templados y a algunos, también calientes. Da igual, como quiera que se tomen están muy ricos, y más, un día después. A ver si os gustan. Siempre rememorando... (De Nada, de AGO,uno de los primeros poemas del libro):
RUINAS son la memoria.
Aquí florecían tempranos
los sanjuanes
y se echaban al sol
lagartos verdes.
Por aquí se llegaba
hasta uno mismo, muy
pronto, caminando.
he sido
bastante más pasado
que futuro o presente.
Como tantos caminos
que se fueron cerrando.
Con vuestro permiso se los brindo a mi amiguina del alma y pa' siempre Susy, que está un poco malina, para que se recupere pronto y siga creando eses muñequines precioses que ella diseña y vivifica con tanto amor. Si no conocéis su blog, os lo recomiendo, está lleno de preciosas Susinas, cada una más guapina. Las fotos no son fiel reflejo de lo preciosas que son, pues cuando las tienes cerca, sinceramente, impactan por los detalles, el realismo y la belleza que encierran. No les falta detalle; en definitiva, que cuida al máximo cualquier cosina que le pidan. Bueno, ya me contaréis. Besinos, amiguina, y te espero para nuestro cafetín, cuando estés bien.
Y a todas las que estáis hoy de comadres, ¡¡¡que tengáis una feliz cena!!!
NECESITAMOS
- Un bollo de pan o media barra, del día anterior
- aceite para freir
Con la miel..., están riquísimos. |
Para remojar el pan
- medio litro de leche
- una rama de canela
- 5 cucharadas de azúcar
- la piel de medio limón
- la piel de media naranja
- un chorro de anís
- 4 huevos
A mí me gustan templadinos. |
Para remojar los borrachinos
- 1 litro y medio de leche
- la piel de un limón
- 200 gramos de azúcar, o azúcar al gusto
- una ramina de canela
- un chorro de anís
Nos presta mucho el toque de canela. |
Para decorar
- Un poco de canela
- unas cucharadas de miel
Cortamos el pan en trocinos y reservamos.
Ponemos la leche a calentar con la piel del limón, de la naranja, la rama de canela, el anís y el azúcar.
Si se deja unas horas con la canela y el limón, está mas rica. |
Cuando hierva, esperamos a que se temple , colamos y lo ponemos sobre el pan. Lo dejamos hasta que se empape bien y quede bien blandín. Removemos.
Hay quien les pone solamente la miga, nosotros ponemos todo el pan. |
Añadimos los huevos y batimos todo muy bien.
Tiene que quedar blandín, pero lo suficientemente consistente para que no se deshaga al freír. |
Mientras vamos friendo los borrachinos ponemos a calentar todos los ingredientes para preparar la leche del remojo. Dejamos que vaya cociendo despacio, para que se mezclen bien los sabores.
Ponemos a freír cucharada a cucharada. |
Vertimos en una sartén el aceite y cuando esté bien caliente vamos poniendo la masa de los borrachinos cucharada a cucharada.
Se fríen bien por un lado. |
Esperamos a que se doren por ese lado y les damos la vuelta para completar su fritura.
Y luego por el otro. |
Los vamos dejando sumergir en la leche del remojo.
Se introducen en la leche bien caliente. |
Les damos un hervor y los dejamos tapados hasta que se enfríen completamente.
Se empapan de la leche y quedan más blandinos aún. |
Quitamos las pieles y las raminas de canela y los servimos sobre un poco de la leche del remojo y poniéndoles miel y canela por arriba.
¡¡¡Os invito a probar!!! |
¡¡¡BUEN PROVECHO!!!