Si quieres, puedes añadir pimiento verde natural muy picadín. |
Es una receta muy sencilla y superfresca. Se hace bastante pronto y os aseguro que no quedará ninguno en la mesa. Cuando los preparo tengo que tener apartada la bandeja porque si me descuido, mejillón que preparo, mejillón que me van comiendo!NECESITAMOS:
- 1 kilo de mejillones de buena calidad
- 1 cebolla grande
- 1 latita de pimientos del piquillo en conserva
- perejil
- 3 huevos
- 1 vasito de aceite de oliva
- vinagre
- sal
Pelamos y picamos en trozos grandes la cebolla.
Troceamos de cualquier manera los pimientos bien escurridos.
Picamos muy menudito el perejil.
Cocemos los huevos 10 minutos en agua hirviendo, pasamos por agua fría, los pelamos.
En el vaso de la batidora ponemos las yemas de huevo ya frías con el aceite y lo batimos muy bien.
Añadimos la cebolla, los pimientos y las claras cocidas y pegamos unos cuantos toques con la batidora. Es importante que vayamos mirando, entre toque y toque, como nos va quedando de picado. Cuando tenga la textura que nos gusta, ponemos el perejil, la sal y vinagre al gusto de cada uno.Reservamos.
Limpiamos bien los mejillones hasta que nos queden libres de algas y demás.
Los colocamos en una cacerola amplia y los ponemos al fuego tapados, hasta que se abran todos.
Una vez cocidos, les retiramos una cáscara a cada uno y los vamos colocando en una fuente plana.
Con ayuda de una cuchara colocamos la vinagreta que queramos por encima de cada mejillón.
Esperamos unos 15 minutos antes de servirlos, para que se integren los sabores.
¡QUE APROVECHE!
Si tardamos en servirlos, es conveniente rociarlos con un poco de aceite de oliva. |