Podéis ver que pan más estupendo, de pueblo, total. |
Cuando vi el vÍdeo en el que hacía este pan me dije que puede que no saliese. Imposible que fuese tan fácil! Sin dejar fermentar el pan, amasando muy poco... Eso, que me parecía imposible. Pues no, de imposible nada, ahí veis este pan. ¡ESTÁ BUENÍSIMO!
NECESITAMOS:
- 310 gramos de harina de fuerza
- 1 cucharadita de sal
- 15 gramos de levadura fresca
- 1 cucharada de aceite de oliva
- 170 ml de agua
- semillas de amapola
Ponemos en un recipiente apto para el microondas el agua y el aceite y lo calentamos un poquito a la máxima potencia.
Sacamos y mezclamos en el líquido la levadura. Batimos bien .
Ponemos en un bol la harina, mezclamos bien las semillas de amapola que queramos y la sal. Añadimos los líquidos para con movimientos envolventes ir mezclando bien la masa y terminando de amasar un poquito en la mesa.
Formamos una bola y la colocamos en un recipiente de cristal apto para el horno, de esos que tienen tapa. Le pegamos unos cortes con un cuchillo bien afilado formando cuadros, abrillantamos la superficie con un poco de aceite y espolvoreamos con harina, lo tapamos.
Ponemos en el centro del horno el recipiente tapado con el pan y SIN PREVIO CALENTAMIENTO ponemos a 220º de temperatura y lo dejamos por un tiempo de 40-45 minutos.
Ya cocido, con cuidado de no quemarnos, quitamos la tapa y lo ponemos a enfriar sobre una rejilla.
¡QUE APROVECHE!
Podéis ver qué tierno y apetitoso me quedó, y eso que estaba aún caliente. ¡¡¡No podía esperar!!! |
Como no tengo el recipiente que ella muestra en el vídeo, para hacerlo puse la masa sobre una fuente de horno alargada y la tapé con otra más pequeña. El resultado ese que veis.