Con unas patatas fritas para acompañar, perfecto. |
Los podemos dejar muy caldosos o que predomine la salsa como buen acompañamiento de unas patatas fritas o cocidas. |
NECESITAMOS:
- 1/2 kilo de restos de bacalao, desalado con 24 horas de antelación
- 1/2 kilo de garbanzos puestos a remojo la noche anterior
- 1 pimiento rojo
- 1pimiento verde
- 2 cebollas
- 3 zanahorias
- 200 gramos de tomate triturado
- 4 dientes de ajo
- 2 cucharadas de pimentón
- 1/2 vaso de vino blanco
- perejil
- aceite de oliva
- sal
- unas hebras de azafrán
Ponemos a cocer los garbanzos en abundante agua y con ellos ponemos una cebolla pelada, el perejil entero y las zanahorias peladas.
Los dejamos cocer, si es en una cacerola normal, hasta que vemos que están tiernos, y si es en olla a presión, una media hora.
Pelamos y picamos los dientes de ajo y la cebolla restante.
Picamos los pimientos.
Ponemos harina en un plato y vamos pasando por ella los trozos del bacalao, bien secos con papel de cocina.
Los doramos en aceite caliente.
Reservamos en una fuente, sin poner papel debajo.
Colamos el aceite sobrante, doramos los ajos y añadimos los pimientos y la cebolla.
Dejamos que se vayan haciendo despacio.
Ya frito, ponemos fuera del fuego el pimentón, removemos y añadimos el vino blanco y el tomate..
Cuando los alcoholes se evaporen, después de unos 10 minutos, añadimos los garbanzos, sin caldo, y los integramos bien a las verduras, ponemos un poco del caldo de la cocción y por arriba los trozos de bacalao.
El aceite que nos queda en la fuente donde estaba el bacalao, la añadimos al cocido, poniéndole por arriba un poco de caldo.
Trituramos la cebolla, las zanahorias y el perejil de la cocción de los garbanzos y lo añadimos al potaje, removiendo con cuidado.
Dejamos cocer el conjunto hasta que quede todo perfectamente unido, unos 5 minutos.
Servir bien caliente.
Otras veces les pongo espinacas. |
¡BUEN PROVECHO!