Ideal como postre o para la merienda, bien fría. |
De" La hora de las gaviotas"
Mi voz es el paisaje
que va echando de menos
las cosas que he perdido.
He nacido en un pueblo
y en el anonimato.
Mi vida se resume en aquel calendario
de números granates
donde mi madre iba
apuntando los partos de las vacas
y visitas al médico.
Fui más feliz que pobre
porque quien no conoce la abundancia
valora las minucias y los pájaros.
Desde niño la hora de las gaviotas
viene siendo mi reino
y el mar un no sé qué
-eternidad dios alma-
donde muero un momento cada día.
Así me veo ahora
cuando ya las gaviotas no conocen mi nombre
y la higuera envejece sobre la sed del pozo.
Mi casa, mis amigos, los míos, los de nadie.
¡Que pronto somos soledad!
A. G. Ovies
NECESITAMOS
- arroz con leche bien cremoso, ver arroz con leche,
- 300 gramos de nata montada
- 100 gramos de avellanas
- 3 cucharadas de azúcar
Podemos caramelizar nueces, pistachos... |
PREPARACIÓN
Hecho el arroz lo trituramos cuando está caliente con la batidora, hasta dejarlo bien fino, que no se noten los graninos. Dejamos enfriar.
Montamos la nata bien firme y la añadimos poco a poco al arroz, con mucho cuidado para mantener lo más esponjosa posible la crema.
A ser posible se mezcla poco antes de servir, así la textura estará perfecta.
Para la decoración
Ponemos el azúcar a derretir en una sartén y cuando alcance el punto de caramelo añadimos las avellanas y las mezclamos bien.
Untamos con aceite un trozo de papel de aluminio y volcamos el preparado de las avellanas, de manera que quede bien plano y repartido.
Cuando esté templando, lo estiramos hasta romper trocinos y seguimos estirando, nos queda una especie de hilos de caramelo.
Esperamos a que se enfríen del todo y decoramos en el momento de servir.
¡¡¡Venga, os invito a una buena ración mirando la mar!!! |
¡QUE VOS PRESTE!