Un plato suave y muy rico |
Os pongo un poema, para poetizar la comidina, jejeje.
No se qué página es ésta
de mi vida,
pero de lo que resta
voy a escribir muy poco.
Voy a decir que hoy es un día hermoso
para ausentarme
y compartir conmigo lo que no me comprendo
todavía.
A. González Ovies, de "La hora de las gaviotas"
NECESITAMOS
Para 8 personas
- una lombarda grande
- 5 tomates
- 2 cebollas
- 3 dientes de ajo
- 1 vaso pequeño de Pedro Ximenez, 150 cl
- 1 kilo de langostinos crudos,pelados
- Las cabezas de 10 langostinos.
- caldo de pescado
- aceite de oliva
- sal
- una pizca de pimentón
Lo dejamos al gusto de cada uno, más seco o con caldo. |
ELABORACIÓN
Pelamos y picamos muy menudín las cebollas y los ajos, por separado.
Pelamos los tomates y les quitamos las semillas, con cuidado de poner debajo un bol para recoger el zumo de su interior, que aprovechamos. Lo partimos en trocinos pequeños.
Limpiamos la lombarda y la cocemos unos minutos en agua hirviendo, para quitarle ese sabor fuerte que la caracteriza. La escurrimos bien y con unas tijeras la partimos lo más pequeñina posible.
Ponemos a calentar el caldo de pescado con las cabezas de los langostinos y cuando hiervan unos minutos, trituramos con la batidora, pasamos por un colador y reservamos caliente.
Ponemos aceite en una cazuela amplia y echamos los ajos hasta que se doren, momento en el que añadimos la cebolla y salamos. Dejamos que se poche bien.
Cuando la cebolla esté casi a punto, después de unos 12-15 minutos, añadimos los tomates y dejamos que cueza el conjunto, removiendo para que no se pegue, hasta que el tomate empiece a quedar blandín, unos 8-10 minutos.
Le ponemos la punta del cuchillo de pimentón, removemos y echamos el Pedro Ximenez.
Esperamos unos minutinos a que se evaporen los alcoholes e incorporamos la lombarda.
Le vamos añadiendo caldo de pescado caliente a medida que lo pida.
Cuando el conjunto esté bien cocido, a gusto de cada uno, ponemos por arriba las colas de los langostinos y dejamos que se hagan 5 minutos, después de que empiece a hervir. Es importante ponerlos en los minutos previos a la comida, porque así se mantienen más jugosos.
Servimos bien caliente.
¡¡¡Os invito a un platín y a una sidrina, con el paisaje de Peñas y el olor a salitre!!! |
¡¡¡¡BUEN PROVECHO!!!!