Fáciles y rápidas. |
Una receta de un dulce que se solía hacer por las Navidades y en Pascua, indistintamente, en nuestra región, aunque ahora se preparan todo el año. Ya se perdió esa tradición de elaborar llambionadas solamente en las fechas señaladas. Por un lado es mejor, poder disfrutar de unes casadielles cuando a uno le apetezca siempre es bueno, pero parece que ya no las disfruto igual. La escasez, en ocasiones, proporciona tanto sabor... No se si os pasa lo mismo, el turrón, por ejemplo, no me parece que sepa igual que antaño. Seguramente será porque antes, esperábamos con ilusión la Navidad para poder comerlo y era una excepción maravillosa. Valorábamos mucho más todo lo que teníamos...
La receta me la dio Melina, una amiga de Cardo. Es la que siempre se hizo en su casa, desde hace muchos años. Y como también tiene nueces caseras y miel, les prepara un relleno delicioso. He de deciros que Melina disfruta cocinando y lo hace de forma inigualable, y es quedarme corta. Porque cuando se pone amor en lo que se hace, todo se traduce en éxito. Ella es así y además muy generosa. Gracias, Melina, guapa, por la receta, por les casadielles y por el resto de comidinas ricas que, seguro, me seguirás anotando.
Espero que os gusten. Ya tenía otra receta de las mismas aquí, bastante parecidas, que son las que hacía nuestra madre. Con la masa de Marita, también quedan muy ricas, pero éstas de Melina, son más hojaldradas.
Ideales para estos días festivos que vienen. |
Un poema de A. G. Ovies
Ramas de invierno
(AGO. Ramas de invierno. Diciembre de 2011) |
Quién sabe si el dolor
es una ilusión muerta
lo mismo que las hojas del árbol
cuando caen
y pertenece al amplio
corazón
de los hombres
sufrir eternamente
las estaciones largas
de la vida.
Si esta noche tan cálida
sería una noche más
si no estuvieras tú y alumbrara
la luna.
Si me dices:
amor, me has desi-
lusionado.
Y es que, en el fondo,
no comprendes
que en el amor un alto porcentaje
son defectos...
Para les casadielles, (14-15 unidades) , necesitamos:
Éstas son de otra tanda que preparé otro día, me quedaron menos doradas, pero igual de buenas y hojaldradas. |
- 1 pocillo de vino blanco
- medio pocillo de aceite de oliva
- 1 yema
- 100 gramos de mantequilla al punto pomada
- 1 cuharada de royal
- 1 cucharadina de sal
- harina, la que admita
Relleno:
- 100 gramos de nueces
- 50 gramos de avellanas ( Melina no se las pone)
- una copina de anís( tres cucharadas)
- 50 gramos de azúcar
- 50 gramos de miel
Además:
- aceite para freír
- azúcar glas para decorar
- un trozo de piel de limón o naranja para freír en el aceite
Elaboración:
Se calienta, el aceite, el vino blanco y la sal. Se bate, hasta formar una especie de crema. fina. |
Se añade la mantequilla, la levadura y la yema |
Se le dan varias vueltas, de la manera que queramos. Yo, opté por repetir tres veces, unas vueltas simples. |
El azúcar y el anís. Se mezcla bien y se reserva. Transcurrido el tiempo de reposo de la masa, se saca de la nevera y se van cogiendo pequeñas cantidades de masa, se estiran con el rodillo. |
Y se van formando rectángulos del tamaño que queramos. Se pone el relleno, no del todo centrado y más bien poco que mucho, para que no se escape. Yo les puse una cucharadina del café a cada una. |
Y queden unes casadielles estupendes. |
El corte, se aprecia el aspecto hojaldrado de la masa. A ver si vos presten |